Ser o no ser (la verdad de la milanesa)

-Diego, no lo vas a creer. Viste quien se murió?

-No. Quien?

-Jorge Rossi -un conductor argentino muy famoso-

-Y ese quien es?

Lo cierto que Jorge Rossi si es/era muy conocido en Argentina y Diego no reconoce a nadie que haya pasado por la televisión  pero si no le cuento a él quien se fue a tocar el arpa, a quien se lo voy a contar?.

Este conductor es parte de una serie de personalidades de mi país que en el ultimo año se fueron de gira. Esta gente poco me importaba, es decir, no es que en Argentina era fan ni mucho menos, pero desde que estoy en Inglaterra han tomado un cierto protagonismo, pero cuando ya se murieron.  No porque tenga una relación extraña con la muerte -que de hecho la tengo, pero ese es otro tema-. Es como si todo se hubiese acelerado y la gente envejeciera mas rápido  Es que uno en la cotidianidad mira, pero no observa, y al estar tan lejos las cosas que suceden en tu lugar de origen te toman por sorpresa. 

Mi Argentina quedó congelada en aquel momento en que me despedí de mi hermana y mis sobrinos en Ezeiza. Entonces todo lo que sucede, desde la frivolidad de leer que  famoso paso a mejor vida o no, pasa a ser "la noticia" del momento.  Leeme sino, a este Jorge Rossi si lo habré visto dos veces en la tele, es mucho, y ahora les estoy haciendo prácticamente un Posthumous Honoris desde mi blog.  

Para las personas que quedaron allá las cosas también cambiaron. Es común escuchar que todo empeoró  a punto de estallar una guerra civil. Es común escuchar que se esta mejor que nunca. Independientemente del tinte político con la que te las cuenten, mi Argentina se esta polarizando, sin tonos grises. Yo miro de lejos pero sigo cerca.  En la Argentina, como en muchos países de Latinamerica las cosas funcionan muy mal, pero es un continente nuevo que debe aprender mucho y si pretendemos ser lo que aun no podemos ser, estamos cagados.  No, no hay que conformarse, hay que superarse y copiar lo bueno de países viejos como Inglaterra. Pero ojo, que cada país tiene su propio karma.

Me gusta vivir en Londres, me gusta hablar inglés, tanto como el hebreo cuando me cruzo con algún israelí y es bueno tener lo básico resuelto. La gente no se estresa, la gente es educada, la gente es fría...

No me gusta escuchar ni a Argentinos de acá  ni a Argentinos de allá decir que mi país es una mierda. Porque los mismos que dicen eso cuando hay un mundial o se juega un partido de fútbol pedorro andan vitoreando "vamos Argentina!".  Hay que tener honor y saberse de donde uno viene. Ningún gobierno de turno me va a hacer pensar lo contrario, por mas corrupto que sea.   Acá me dejaron plantado varias veces en citas que tenia programadas, y todo porque cayó  dos copitos de nieve, y eso no convierte a los ingleses en una cagada. 

Bueno, empecé  a escribir pensando una cosa y terminé escribiendo otra. Para ir cerrando, porque sino voy a filosofar sobre la vida útil del Tamagochi.

Es bueno cambiar las cosas que no funcionan y buscar nuevos destinos, pero también es hora de mostrarle al mundo que podemos vivir en otros lugares, adaptarnos pero recuperando esa esencia que hemos perdido, la de llevar tu nacionalidad como los ciudadanos dignos la llevan.

Si el termino "colonización" nos molesta tanto, dejemos de actuar como "colonizados".  Don't cry for me Argentina (cuak)